¿Tu prenda favorita se encogió en la lavadora? No te preocupes, existe un truco casero sencillo y económico que puede ayudarte a devolverle su tamaño original sin necesidad de acudir a un profesional. Solo necesitas agua tibia y un poco de acondicionador para el cabello.
El método, popularizado entre amantes del DIY, consiste en aprovechar las propiedades suavizantes del acondicionador para relajar las fibras de la tela y permitir que se estiren nuevamente. A continuación, te explicamos el paso a paso:
¿Cómo recuperar ropa encogida en simples pasos?
- Prepara la mezcla: Llena una cubeta con agua entre tibia y ligeramente caliente. Añade acondicionador para el cabello (la cantidad dependerá del número de prendas) y mezcla bien hasta disolver completamente.
- Sumerge la prenda: Introduce la prenda encogida en la mezcla y déjala reposar durante 20 minutos. Esto ayudará a que las fibras se relajen.
- Retira el exceso de agua: Saca la prenda con cuidado. No la exprimas. En su lugar, colócala sobre una toalla y envuelvela suavemente para absorber el exceso de humedad.
- Estira con cuidado: Una vez retirada parte del agua, coloca la prenda sobre una toalla seca y comienza a estirar las zonas que deseas agrandar, aplicando una fuerza moderada para evitar dañar la tela.
- Secado y verificación: Deja que la prenda se seque al aire, preferiblemente en posición horizontal. Una vez seca, pruébala para comprobar si el resultado es el deseado.
Este truco funciona mejor con prendas de algodón, lana o tejidos que contengan fibras naturales. No garantiza resultados en telas sintéticas, pero puede marcar una diferencia notable en casos leves de encogimiento.
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