Cuando se acerca diciembre, miles de familias comienzan a buscar los adornos más coloridos y tradicionales para sus celebraciones. Entre ellos, las piñatas se convierten en protagonistas absolutas. Muy cerca de la Ciudad de México existe un destino que, cada temporada, se convierte en el epicentro de esta tradición. Un lugar donde los talleres artesanales mantienen vivo un legado que lleva décadas alegrando posadas y reuniones.
Si estás planeando tus fiestas y quieres encontrar modelos únicos, hechos a mano y con colores vibrantes, este pueblo del Estado de México es considerado el hogar de las mejores piñatas del país.
¿Cuál es el mejor pueblo para comprar piñatas en Navidad?
El lugar más reconocido para adquirir piñatas de excelente calidad durante la temporada decembrina es Acolman, ubicado en el Estado de México. Este municipio es famoso por ser cuna de la tradicional piñata de siete picos y por albergar artesanos que han pasado su conocimiento por generaciones.
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Durante noviembre y diciembre, las calles se llenan de figuras gigantes, diseños personalizados y creaciones hechas con técnicas artesanales que no encontrarás en otro sitio. Tanto compradores mayoristas como familias llegan al municipio para abastecerse de piezas coloridas, resistentes y elaboradas con materiales tradicionales como olla de barro, cartón y papel china.
Además, Acolman es conocido por su famosa Feria de la Piñata, un evento que reúne a los mejores artesanos del país y donde se exponen verdaderas obras de arte.
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¿Qué hacer en Acolman, Estado de México?
Además de ser un paraíso para quienes buscan adornos navideños, Acolman es un destino con historia, arquitectura impresionante y actividades culturales para complementar la visita.
Entre sus atractivos más destacados se encuentran:
- El Ex Convento de San Agustín, una joya del siglo XVI y una de las construcciones más importantes del periodo virreinal.
- La Feria de la Piñata, celebrada cada diciembre, donde además de comprar artesanías puedes disfrutar música, gastronomía típica y concursos de piñatas gigantes.
- Talleres artesanales, donde es posible observar el proceso completo de elaboración, desde el moldeado hasta el decorado final.
- Gastronomía local, con antojitos, dulces típicos y bebidas tradicionales ideales para quienes desean degustar la cocina del Estado de México.
Acolman combina tradición, turismo cultural y comercios locales que mantienen viva una de las costumbres más queridas de la temporada.
¿Cómo llegar a Acolman, el pueblo piñatero por excelencia desde la CDMX?
Llegar a Acolman desde la Ciudad de México es muy sencillo y solo toma entre 45 y 60 minutos, dependiendo del tráfico. Hay dos rutas principales:
- En auto:
Toma la autopista México–Pachuca y sigue las señalizaciones hacia Teotihuacán. Antes de llegar a la zona arqueológica encontrarás los desvíos que conducen directamente a Acolman.
- En transporte público:
Desde la Central del Norte salen autobuses hacia Teotihuacán. Al llegar, es posible tomar un taxi o combi local que te deja en el centro del municipio.
La accesibilidad del destino lo convierte en una excelente opción para comprar piñatas, pasear y disfrutar una escapada corta sin alejarte demasiado de la ciudad.
Acolman se ha consolidado como el lugar ideal para encontrar las mejores piñatas para las fiestas de fin de año. Su tradición artesanal, su historia y su cercanía con la CDMX lo convierten en el destino perfecto para quienes buscan piezas únicas para sus posadas. Ya sea para comprar al mayoreo, para disfrutar su feria o simplemente para recorrer sus calles llenas de color, este pueblo mexiquense es el punto más importante del país para celebrar la temporada navideña con estilo y tradición.